Un camino largo, frío, caluroso, hambriento de caricias, de personas humanas verdaderas, bondadosas, compasivas, misericordiosas.
Un camino de abandono, traiciones, sufrimientos y sin sabores, penas y sentimientos olvidados, la miseria inerte del silencio entre los cerros, sin agua ni comida muriendo en el abandono.
Un camino donde siento en la piel a pesar del abrigo, el frío hielo invernal, la nieve con la lluvia cuando moja y seca el estómago de hambre.
Un camino que sofoca el cuerpo de calor en verano por la escasez legítima del agua.
Un camino empinado, vacío, lleno de curvas, cuestas en subida y bajada, polvorientos, barrosos, secos, nostálgicos, peligross precipicios y paredes rocosas duras.
Un camino que me incita a seguir la meta de llegar arriba, al final de mis sueños.
Un camino donde hubo veces me saqué la cresta corriendo entre los cerros,
la experiencia dice hoy, camina, los años no se detienen y ellos no pueden seguir esperando.
Un camino que no es lo que yo creía, pero existe fiel a nuestra realidad, la miseria humana.
Un camino de los míos, derecha y honesta siempre con ellos, hasta el final de mis días, si Dios me lo permite.
Un camino que me enseña a sobrepasar los baches que encuentro, a quitar las piedras que molestan, a cuidar las flores que florecen, a respetar la vida que en ellos existen.
Un camino solitario, negro en noches oscuras o lunas llenas.
Un camino sin prisas, sin traiciones, sin apuros, sin memoria.
Un camino que se va quedando en mi mente y en la mente de los que fielmente me siguen.
Un camino difícil de andar, sin poder encontrar la salida.
Un camino donde se corren riesgos, rompiendo en parte mis reglas, olvidando mis propios caminos de vida.
Un camino donde la muerte se apodera de los cuerpos, y me reencuentra con mi mundo.
Así son los caminos que recorro junto a mi esposo, todos desiguales, donde el tiempo pasa callado entre las rendijas de los cerros, las ramas de los árboles, mundos diferentes que pocos conocemos, realidad inexistente de los barrios altos y el mundo de la plata que a nosotros nos serviría para llevar a cabo mis sueños.
Da lo mismo el nombre del camino, pero existen cientos de caminos como los que recorro.
Un día sin querer llegué a un camino, y ese día, el destino marcó y detuvo parte de mis caminos.
Quisiera soñar caminos como lo dijo alguna vez Antonio, caminos vacíos, sin mascotas abandonados.
Cuando veas que el camino se estrecha, no desesperes.
A quién tiene sueños, siempre habrá caminos nuevos para llegar a ellos.
Seguiré soñando...
NO MAS ABANDONO DE PERROS
Marcela Opazo Castro
http://www.losperrosdelcamino.cl
http://losperrosdelcamino.blogspot.com
Nota: la música del video es sin querer, pertenece a mi amado Calamaro, es un cd. original que va conmigo por todas partes.
6 comentarios:
YO QUIERO IR POR TUS CAMINOS
OTRA VEZ.
Esthefany
Yo tambien espero volver por ese camino hermoso y triste a la vez,no es facil recorrer esos caminos y por eso te admiro Mariposita,para mi fue bien duro pero lo haria mil veces de nuevo,recibe todo mi carino y ojala pronto pueda repetir esa linda aventura.
Donde ustedes están...¿hay caminos como estos?...
Tengo una gran amiga que jamás se hubiera atrevido a andar por esos caminos en su pais, en cambio este lo recorrió varias veces.
Gracias
Si hay caminos pero para lo que se hacen los caminos para viajar,admirar el paisaje ,bajarse a hacer un pipi cuando el viaje es muy largo,etc,etc,etc,no para que malditos hijos de puta abandonen a sus mascotas,xxxs
El sábado recién pasado fui con Marcela al camino por primera vez.
Es difícil no conmoverse con los perros abandonados que hay en toda la ruta, pero la lástima por sí sola no sirve de nada, por lo que hay que canalizar la emoción y convertirla en energía de acción.
Vi más de 100 perros, sucios y flacos, los que a la llegada de Marcela corrían a su encuentro, moviendo sus colas en señal de cariño y agradecimiento. Es un sentimiento fuerte ver como seres que ha acompañado al hombre en su andar por la tierra, de pronto son desechados por egoísmo, indiferencia y estupidez. Por otra parte, conmueve verlos agradeciendo el gran esfuerzo que Marcela y otros hacen por ellos. Corren, saltan, mueven la cola, te lamen las manos. La felicidad puede alcanzarse a veces con tan poco como un gesto sencillo, un poco de comida, y cariño.
Voy a difundir entre mis conocidos tu Blog, y como te dije, voy a ayudarte en tan noble tarea.
Con profunda admiración.
Germán Martinez
HOLA AMIGA ... CUANDO LEO LO QUE ESCRIBES , NO TE MIENTO MIS OJOS SE LLENAN DE LAGRIMAS Y YO SI VI ESE CAMINO LLENO DE TANTOS ABANDONADOS, PERROS HERMOSOS QUE UNO SE PREGUNTA, COMO PUDIERON ABANDONARLOS?... COMO LA CHASCONA LA VOLUNTARIA , MARTIN MI BELLA KATTY LA EFINGE
Y TODOS LOS DE LA ISLA Y RECUERDO AQUEL DIA QUE ENCONTRAMOS UNO QUE SE TAMBALEABA Y CASI SE CAE POR UN BARRANCO Y TU EMPESASTES A LLORAR DE IMPOTENCIA DE RABIA, Y YO SENTIA TUS LAGRIMAS EN MI CORAZON Y SENTI IMPOTENCIA POR NO PODER HACER NADA
EL PITBUL NEGRO QUE TENIA EL ANO SALIDO, ESOS RECUERDOS LOS LLEVO EN MI CORAZON,Y LLORO CADA VEZ QUE ME DICE QUE DE ELLOS CASI TODOS DESAPARECIERON, PERO ARRIBA HAY UN DIOS QUE TODO LO VE,POR ALGO PASAN LAS COSASY QUISAS PRONTO SAQUEN UNAEY A FAVOR DE TODOS LOS PERRITOS Y QUISAS MUY PRONTO LO RECORRA NUEVAMENTE
SUSY1944@HOTMAIL.COM
Publicar un comentario