Los Perros del camino

13 de febrero de 2013

"Grandu"


Era de noche cuando lo vimos por vez primera. Un bulto grande sentado en medio del camino. Es un perro mestizo blanco con manchas café, entre raza rottweiller con San Bernardo, me recuerda a Nerón,  aun parece  cachorro, se ve grandulón, medio pánfilo para caminar por lo grande que parece ser, siendo aun un cachorro con necesidad de  manos que acaricien.

Tristeza, impotencia sientes cuando ves a un perro que es tan fácil de querer por su carácter, manera humilde e inocente, lo han ido a botar hace algunas semanas junto a su supuesta madre. Les ha costado mucho ambientarse al lugar, el pequeño grandulón gigante anda de un lado para otro, no se acerca y menos se deja tomar.

Con el pasar de los días, ha ido tomándonos confianza, acepta que les llevo comida y agua. Los dejaron en un lugar donde el agua no existe, a menos que llueva, el río queda muy lejos de sus patas. El sector huele a perro muerto, es el cadáver de un labrador viejo que no fue capaz de resistir el abandono.

La vez anterior cuando fuimos, nos llamó la atención que ellos no estaban en el lugar, igual dejé algo por si acaso. Quise imaginar que alguien de bueno se los pudo haber llevado a los dos, pero no fue así. Hoy al volver, sale Grandu a encontrarme, gime, un gemido que duele el alma escuchar. Me acerco, y me encuentro que su pata izquierda trasera parece como si fuera de una vaca. Logro mirarlo, cierro los ojos de manera asombrada con rabia y pena. Su pata estaba con balas entre medio de los dedos, sangrando, con el hueso a la vista. Que fuerte!...hacía mucho tiempo que no me pasaba este tipo de casos.
Cuesta decidir que hacer cuando no se tiene los medios como para rescatarlo y llevarlo a un lugar donde pueda dedicarle parte de mi tiempo a los cuidados que necesita.

Con inmensa impotencia, me siento vulnerable ante tal situación. Sigo subiendo, y en el último lugar junto a mi ángel, decido pensar en traerlo. Mañana es el día de San Valentín, me digo, que mejor regalo para mí que poder sacarlo de este infierno.
De vueltas, paso a buscarlo. Me detengo, lo llamo una y otra vez.   La noche está oscura, la luna nueva que me acompañaba se ha perdido entre los cerros. El silencio se siente en el aire, pero Grandu no quiso aparecer.

Feliz Día de San Valentin, confío que llegará el día que aquellos perros abandonados volverán a sentir el verdadero amor tras una nueva oportunidad. Soñar es gratis. Querer es poder.

Hay que seguir.

Tu has leído, si lo quieres adoptar, avisame para seguir rescatando a los perros del camino.

NO MAS ABANDONO DE PERROS

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Me alegro que me dejes tus comentarios y hacerme participe de tus pensamientos, es la única forma que alguien nos escuche, siendo cada día mas EN CONTRA DEL ABANDONO DE PERROS.
Si es posible que me dejes un correo donde contestarte de lo contrario te contestaré aquí mismo.
Muchas gracias por atreverte. Son pocos los valientes que se atreven a dar a conocer sus ideas.